(del latín sensus, de sentire, percibir por los sentidos o por la inteligencia)
Tiene sentido lo que es capaz de ser percibido por los sentidos o por la mente; propiamente lo que puede ser comprendido. La ciencia en general no es otra cosa que una comprensión o interpretación (de las regularidades de los fenómenos) del mundo; y el lenguaje -«mundo» de los signos- no es sino un sistema de signos, de los cuales se estudia su significado. La clásica «pregunta por el sentido» se dirige, no hacia los fenómenos del mundo ni hacia los signos del lenguaje, sino propiamente a cosas, conjuntos de cosas o procesos poco susceptibles de ser tratados científicamente, como, por ejemplo, el mundo en su conjunto, el hombre, la vida, la historia, la muerte, etc. Para estos casos, se percibe sentido si cada una de estas cosas puede ser inscrita en una serie ordenada de causalidades (que explican su razón de ser), o de finalidades (que explican su relación a un fin); si hay para todo ello respuesta a las preguntas ¿por qué? o ¿para qué?
De todas maneras, rigurosamente hablando solamente tienen sentido las acciones humanas, es decir, aquellos actos realizados por una agente (individuo, grupo o agente impersonal) libre y voluntariamente. Esta acción depende fundamentalmente de las creencias, conocimientos o saberes del agente, y de los fines o propósitos que persigue, y el sentido de dicha acción consiste en poder conocer dichos fines. Las acciones humanas son clases de acontecimientos, como lo son los sucesos (las caída de un rayo, por ejemplo) o los procesos (la subida de la marea, por ejemplo) naturales, pero solamente las acciones humanas tienen sentido, mientras que los acontecimientos naturales carecen de él. Por ello, los actos humanos se pueden comprender (y, a veces, explicar), mientras que los acontecimientos físicos solamente se pueden explicar.
La pregunta por el sentido de algunas de estas cosas puede constituir un problema filosófico.
Bibliografía sobre el concepto
- Grondin, J., Del sentido de la vida. Un ensayo filosófico. Herder, Barcelona, 2009, 1 ed.
- Castrodeza, C., El flujo de la historia y el sentido de la vida. La retórica irresistible de la selección natural. Herder, Barcelona, 2013.