Teórico social y anarquista ruso de origen noble (tenía el título de príncipe). Nació en Moscú, fue geógrafo de profesión y abrazó en sus inicios la carrera militar. Como oficial participó en varias expediciones militares y geográficas en Siberia. Tras ser consciente de los abusos e injusticias sociales, abandonó la carrera militar y se dedicó primero a la geografía y, posteriormente, a las ciencias sociales.
Perteneció a la Internacional Obrera (AIT), a la que se afilió en Suiza en 1872. De vuelta a Rusia participó en las actividades de círculos anarquistas nihilistas. Fue arrestado, pero logró escapar de la cárcel después de dos años de privación de libertad. Junto con Elisée Reclus fundó el periódico La Revuelta, que llegaría a ser uno de los órganos más importantes de difusión del pensamiento anarquista. Después del atentado realizado en Rusia que costó la vida al zar Alejandro II, Kropotkin fue expulsado de Suiza, y se exilió a Inglaterra. Posteriormente se instaló en Francia, donde también fue arrestado en 1882 y condenado a cinco años de cárcel. Liberado en 1886, volvió a Londres, donde se centró en sus trabajos de geografía e historia literaria. Con el clima revolucionario ruso volvió a San Petersburgo en 1917. El gobierno menchevique de Kerensky le ofreció un puesto de ministro que rechazó, a la vez que manifestaba su desacuerdo con dicho gobierno. Pero su escepticismo no fue menor con la llegada de Lenin y los bolcheviques al poder.
Kropotkin fue uno de los autores que, desde el terreno de las ciencias sociales, combatió el darwinismo social. En contra de las tesis de los defensores de esta doctrina ideológica, Kropotkin destacó que, incluso en el mundo animal, la lucha por la supervivencia no significa necesariamente la lucha de unos contra otros, sino que a menudo se consigue mediante la cooperación o apoyo mutuo (título de uno de sus libros más influyentes), de manera que, según él, las especies que más prosperan son aquellas que más recurren a la colaboración entre sus miembros, colaboración que se presenta como el mejor factor de supervivencia. Con ello, se adelantaba a algunas concepciones expuestas por los teóricos de la actual sociobiología.
Su anarquismo se inspiraba en Rousseau, el romanticismo y en los socialistas utópicos, pero también en Goethe, Spinoza y Darwin. Defendió un colectivismo conciliable con el Estado, la libertad del individuo y la solidaridad entre los seres humanos, así como una ética fundamentada en la igualdad de todos los hombres
Relaciones geográficas