(del latín deductio, acción de derivar o hacer descender, conducción; corresponde a los aristotélicos άπαγωγή, apagogé, y άπόδειζις, apódeixis)
Operación mental, llamada inferencia, por la que afirmamos la verdad de un enunciado partiendo de la verdad de enunciados conocidos. Una deducción toma la forma expresa de un razonamiento, o secuencia de fórmulas que o son axiomas, o teoremas, o premisas o fórmulas derivadas de otras mediante reglas de inferencia. A toda deducción formal le corresponde una estructura, o forma. Los razonamientos, por razón de esta forma, pueden ser válidos, o correctos, o inválidos e incorrectos.
Una deducción formal consta de una secuencia finita de fórmulas que o son supuestos iniciales, axiomas o teoremas, o bien fórmulas que se siguen lógicamente de los supuestos iniciales por aplicación de reglas. El último elemento de la secuencia es la conclusión del razonamiento.
No es raro, en la lógica moderna, preferir el término derivación al de deducción.