De una palabra griega que quiere decir «asamblea», esta palabra se aplica primeramente a reuniones de lectura sagrada y de oración en el judaísmo, después al edificio que las abrigaba y finalmente a la asamblea ideal del pueblo judío. En sentido teológico, hace referencia a la «Iglesia» del Antiguo Testamento, la sociedad religiosa israelita obrada por Dios.