Filósofo catalán nacido en Vilafranca del Penedès. Fue alumno de Martí d'Eixalà, en la Universidad de Cervera y catedrático de metafísica de la Universidad de Barcelona desde 1847 hasta su muerte. Formó parte del núcleo de la llamada Escuela de Barcelona (formada por su maestro Martí d'Eixalà, Joaquim Xirau y Jaume Serra Húnter, entre otros). Su filosofía, que se mantuvo distante de las corrientes tomistas, se vio fuertemente influenciada por la escuela escocesa del sentido común, especialmente por el pensamiento de Hamilton y Mansel, aunque también manifiesta influencias kantianas, del espiritualismo y de Trendelenburg. Formuló un sistema filosófico general y centró su investigación en los ámbitos de la psicología racional y de la lógica. La primera mostraba que los diversos estados psíquicos están organizados según leyes que, de esta manera, y en cuanto que condiciones del conocimiento, son también leyes gnoseológicas. La lógica no es solamente lógica formal, sino que también es lógica trascendental que permite el acceso a todas las formas del conocimiento. De la unión de estas tesis infería que las verdades ontológicas básicas deben probarse a partir del análisis de la conciencia, la cual tiene dos vertientes: una vertiente individual, y una vertiente colectiva. El examen de la conciencia individual, a partir de la observación de nuestro yo, nos revela inmediatamente el no-yo y nos conduce al realismo natural. El cogito ergo sum de Descartes se transmuta así en un cogito ergo es. Por otra parte, la conciencia colectiva, en su grado más perfecto, se expresa a través del sentido común, que puede llegar a ser una forma del espíritu o conciencia nacional en aquellas comunidades que han alcanzado su madurez. Para alcanzar ésta, es preciso un esfuerzo colectivo e institucional orientado hacia una reforma de la enseñanza (tesis que influyó en Francisco Giner de los Ríos y en los krausistas españoles). Propugnó una síntesis entre racionalismo y empirismo y defendió que, en la cúspide de la reflexión filosófica, se halla la teología racional que permite el conocimiento de Dios: condición de toda verdad.
Entre sus discípulos y amigos se encontraban, además del mencionado Giner de los Ríos, Menéndez y Pelayo y Milà i Fontanals. Sus principales obras son: De la unidad de la filosofía (1847); Sobre el desarrollo del pensamiento filosófico (1854); Memoria de la filosofía de Martí d'Eixalà (1859) y Lecciones de filosofía (póstuma, 1920), editada a partir de los apuntes taquigráficos de Josep Balarí Jovany.
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