(del griego ἀντίθεσις, antíthesis, oposición) Segundo momento de la dialéctica que, precedido de la tesis y seguido de la síntesis, constituye el proceso de transformación en tres fases sucesivas de la idea, según Hegel. Aparece en este sentido por vez primera en Fichte. Es el momento de la negación de la tesis. Hegel lo considera el momento de la exteriorización de la idea, y de la escisión, esto es, de la manifestación de las contradicciones.