(del griego όρθο, ortho y γένεσις, génesis: origen recto o derecho)
Término creado por Eimer en 1888 para designar la teoría biológica que sustenta que el camino evolutivo de todas las especies está prefijado y marcha en línea recta hacia un fin determinado previamente e independiente de la selección natural. En general, las concepciones vitalistas (como la bergsoniana, por ejemplo, (ver texto) suponen una determinada forma de ortogénesis al sustentar que la evolución está determinada por un élan o principio vital. Por su parte, los lamarckistas sustentan otra forma de ortogénesis engendrada por la acción del medio que, según ellos, determina las líneas evolutivas. En particular, esta doctrina fue defendida por Karl Wilhelm von Nägeli (1817-1891), quien defiende la existencia de una fuerza psicoquímica que ocuparía en la evolución el mismo papel que la inercia ocupa en la mecánica. Desde otra perspectiva, también Popper, que critica las insuficientes explicaciones de la teoría darwinista de la selección natural, defiende una cierta ortogénesis (por ejemplo en Conocimiento objetivo, Tecnos, Madrid p.250-259.)