Filósofo catalán. Nació en Figueres y estudió en la universidad de Barcelona, siendo discípulo de Jaume Serra i Húnter y de Tomàs Carreras i Artau. Se doctoró en Madrid, donde recibió la influencia de García Morente, de Ortega y Gasset y de M.B. Cossío, de la Institución Libre de Enseñanza. Completó sus estudios en París. Posteriormente, fue profesor en la universidad de Zaragoza y, a partir de 1927, de la universidad de Barcelona. Junto con Jaume Serra y Francesc Mirabent formó el núcleo de la llamada «escuela de Barcelona». Es padre del también filósofo Ramon Xirau i Subias (Barcelona 1924).
En 1939, huyendo del franquismo, se instaló en México, donde fue profesor en la Escuela Nacional. Reunió un nutrido e importante núcleo de discípulos (Maragall, Ferrater Mora, Bofill, etc.).
Seguidor de la fenomenología de Husserl, de la orientación filosófica de Max Scheler, de Moore y de Bergson, se ocupó fundamentalmente de la teoría de los valores. Aunque por formación estuvo cercano a las tesis idealistas (en Descartes y el idealismo subjetivista moderno, 1927), su pensamiento se dirigó a la superación del idealismo subjetivo a partir de la noción de amor, que permite la confluencia entre ser y valor, lo que posibilita también la rígida superación entre lo subjetivo y lo objetivo. Influenciado por la corriente fenomenológica y por la filosofía de Scheler prosiguió sus investigaciones criticando los intentos de aplicar una lógica intelectualista a la espontaneidad de la acción. Destaca que el ser no es nunca propiamente en sí ni propiamente en otro, sino que se halla en la confluencia de ambos polos: entre lo objetivo y lo subjetivo. A su vez, tampoco estos dos polos tienen una existencia propia, ya que como meras abstracciones son una pura nada, lo cual es aplicable también a las nociones de ser y de valor. La orientación de su pensamiento se dirigió hacia una reforma de la sociedad basada en la educación.
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