Para una respuesta que no se pueda expresar, la pregunta tampoco puede expresarse.
No hay enigma.
Si se puede plantear una cuestión, también se puede responder.[...]
Pues la duda sólo puede existircuando hay una pregunta; una pregunta, sólo cuando hay una respuesta, y ésta únicamente cuando se puede decir algo.
Tractatus Logico-Philosophicus, 6.5, 6.51, Alianza, Madrid 1973, p. 201. |