Al establecer los axiomas por medio de la inducción hay que buscar una forma de inducción distinta de la actualmente en uso [...]. La inducción que procede por enumeración simple es algo pueril, concluye de forma precaria, se expone al peligro de una instancia contradictoria y se pronuncia generalmente a partir de un número de particulares más restringido de lo conveniente e incluso según aquellos que están al alcance de la mano. Sin embargo, la inducción útil al descubrimiento y demostración de las ciencias y de las artes debe separar la naturaleza por medio de los debidos rechazos y exclusiones y finalmente concluir afirmativamente, tras tantas negaciones como sean precisas.
La gran restauración. Aforismos sobre la interpretación de la naturaleza y el reino humano, CV (Alianza, Madrid 1985, p. 160). |