Aristóteles: los predicables

Extractos de obras

Todo predicado de un sujeto debe ser o bien convertible con su sujeto o no, y si es convertible será su definición o propiedad; pues esto hemos dicho que era una propiedad, a saber: lo que se puede predicar de un sujeto de manera convertible, pero sin significar su esencia. Si, por otra parte, no se predica de manera convertible de la cosa, o bien es uno de los términos contenidos en la definición o no lo es; si es uno de esos términos de la definición del sujeto, será su género o su diferencia, puesto que la definición se compone del género y de la diferencia o diferencias; mientras que si no es ninguno de estos términos, será evidentemente un accidente, ya que se ha dicho que el accidente era lo que pertenece como atributo a un sujeto, sin ser su definición, su género o una propiedad.

A continuación, pues, hemos de distinguir entre las clases de predicados en que se encuentran o los cuatro órdenes de predicación susodichos. Esas clases son diez en número: esencia, cantidad, cualidad, relación, lugar, tiempo, posición, hábito o estado, acción, pasión. Porque el accidente, el género, la propiedad y la definición de cualquier cosa estará siempre en alguna de estas categorías, pues todas las proposiciones efectuadas por medio de éstas significan o bien la esencia de algo, o su cualidad, o la cantidad, o algún otro de estos tipos de predicados dichos.

Tópicos,cap. 8-9 (Obras, Aguilar, Madrid 1973, 2ª ed., p. 423).