El esquema de la sustancia es la permanencia de lo real en el tiempo, esto es, la representación de tal realidad como sustrato de la determinación empírica temporal en general, sustrato que, consiguientemente, permanece mientras cambia todo lo demás. (No es el tiempo el que pasa, sino que es la existencia de lo transitorio lo que pasa en él). [...]
El esquema de la causa y la causalidad de una cosa en general es la realidad a la que sigue algo distinto, una vez puesta esa realidad, cualquiera que sea. Consiste, pues, en la sucesión de lo diverso, en la medida en que tal sucesión se halla sometida a una regla.
El esquema de la comunidad (acción recíproca) o de la causalidad recíproca de la sustancia respecto de sus accidentes es la coexistencia de las determinaciones de una en relación con las de las otras conforme a una regla universal.
El esquema de la posibilidad es la concordancia de la síntesis de distintas representaciones con las condiciones del tiempo en general. [...]
El esquema de la realidad es la existencia en un tiempo determinado.
El esquema de la necesidad es la existencia de un objeto en todo tiempo.[...]
En realidad, el esquema se reduce, pues, al fenómeno o concepto sensible de un objeto concordante con la categoría.
Kant, Crítica de la razón pura, Analítica trasc., libro segundo, cap. 1 (Alfaguara, Madrid 1988, 6ª ed., p. 187-188). |