Ayer: el criterio de verificabilidad aplicado a sustancia

Extractos de obras

Supongamos que se descubra un cuadro y que se sugiera que ha sido pintado por Goya. Para tratar este tipo de cuestiones existe un procedimiento definido. Los expertos examinan el cuadro para establecer en qué forma se parece a los trabajos de Goya reconocidos como auténticos, y para determinar si lleva algún signo característico de falsificación; investigan en documentos de la época en busca de testimonios sobre la existencia de dicha pintura, etc. Al final quizá estén todavía en desacuerdo, pero cada uno de ellos sabe qué elementos probatorios servirían para confirmar o desvirtuar su opinión. Supóngase ahora que estos hombres han estudiado filosofía y que algunos de ellos afirmen que el cuadro de que se trata es un conjunto de ideas en la mente de quien lo percibe, o en la mente de Dios, mientras los otros sostienen que es objetivamente real. ¿Qué posible experiencia podría tener cualquiera de ellos que resultara pertinente para la solución de esta disputa de una manera u otra? En el sentido ordinario del término «real», en el que se lo opone a «ilusorio», la realidad del cuadro no se pone en duda. Los contrincantes están convencidos de que, en este sentido, el cuadro es real, por haber tenido una serie coordinada de sensaciones visuales y táctiles. ¿Hay algún procedimiento similar por cuyo intermedio podrían descubrir si el cuadro es real, en el sentido de que el término «real» se opone a «ideal»? Evidentemente no lo hay. Pero entonces el problema es ficticio, según nuestro criterio; lo cual no quiere decir que la controversia realismo-idealismo tenga que descartarse sin más, ya que se la puede considerar legítimamente como una disputa relativa al análisis de proposiciones existenciales e involucra por tanto un problema lógico que, como veremos, es susceptible de ser resuelto en forma definitiva. Lo que acabamos de demostrar es que la cuestión en disputa entre idealistas y realistas se hace ficticia cuando se le da, como sucede a menudo, una interpretación metafísica.

Lenguaje, verdad y lógica, Eudeba, Buenos Aires 1971, 2ª ed., p. 48.