Ésta podría ser una edición anterior y no la más reciente o aprobada.
Ir a la versión actual.
Cuando un hablante pronuncia un enunciado como «Te prometo que iré mañana» sin tener la intención de ir, no se puede decir que este enunciado sea falso, o que el hablante no haya prometido; sólo se puede decir que el acto ha sido fallido.